martes, 18 de septiembre de 2007

Re flex ion

De sobra sabéis cual es mi estilo, aglutinado le llaman.
Te paras a pensar en cada uno de los elementos que configuran las cosas.
En esa estructura que crea algo puedas verlo o no. Y quizás es el miedo lo que nos hace juntar las cosas. Pero por sí mismas son estrellas rodeadas de un enorme espacio. Un espacio que forma parte del universo y por tanto de un conjunto nuevamente hablando. Todo está conjuntado, incluso las abstracciones. Pero, ¿dónde está el conjunto que lo engloba todo? ni estoy hablando materialmente, ni del Bigbang. Tampoco del subconsciente ni de Dios. ¿Puede ser un conjunto desconocido o indescifrable? ¿Puede ser el infinito un conjunto? Si nuestro ojo tiene 200 millones de píxeles, y el cerebro 100.000 millones de neuronas, es dogma pensar en la limitación de todo. Y esa limitación es lo que nos da miedo a un nivel inconsciente.


Sin embargo hay un concepto (no sé si debería llamarlo así) que todavía no ha entrado y que me desconcierta. Amor. Y es que no puedo pensar en que el hombre se empareja (conjunta) con otra por tiempo y esfuerzo. Ni los animales. Por ello, ¿será el amor el conjunto que lo engloba todo?

ismael im


7 comentarios:

Anónimo dijo...

madre mía... que os tengo dicho? ;)
pues sí, puede ser... por qué no?
en cualquier caso, queridos amigos, no se me queden ninguno fuera del conjunto!

pero oye, no dará más miedo ser conscientes de nuestra limitación en lo aparentemente ilimitado?

Anónimo dijo...

Creo que hay muchos tipos de amor, aunque para esto Patri es la experta... cada uno de estos tipos deberían impregnar las múltiples facetas de nuestra existencia.

Ojala el amor de pareja nunca fuera un conjunto que lo engloba todo pues esto crearía un límite... y no debiera de tener límites ni mucho menos crear límites...

Por tanto es posible que nos de miedo la limitación, pero a caso esas limitaciones vienen dadas o las generamos nosotros...?

No sé, muchas dudas...

Helí buena pregunta... pero no te me vayas a quedar sin dormir... que hay que descansar.

Creo que realmente de lo que tememos es de nuestras propias limitaciones.

UN BESOTE MUY GRANDE.

Anónimo dijo...

joder úrsula! parece que no te enteras!!!!! ja ja ja

IZQUIERDO dijo...

Piiii Piii pii

Una de la mayores "limitaciones" a las que se enfrentamos ismael, es el desconocimiento de lo que habrá más allá de la muerte y precisamente esa incertidumbre es la que incentiva al hombre en su ansia de conocimiento, de querer reducir todo lo que le rodea a simples datos como las sustancias que segrega tu cuerpo cuando te enamoras y el tiempo que estás harán efecto, reduciendo así lo que llamas amor a unos simples datos.

Estos datos y estos estudios, sin duda alguna es parte de la evolucion humana, pero por otro lado son puro reductismo que nos llevan a creer que podremos llegar algun dia a comprender la inmensidad del mundo que nos rodea, algo absurdo, ya que hay cosas en la vida que aunque se expliquen y fragmenten en mil estudios, realmente son cosas que se escapan al conocimiento como ese amor del que hablas.

Y bueno eso de pensar que el amor lo une todo y tal es muy bonito, yo personalmente no creo que sea el amor, si no precisamente ese miedo a esas limitaciones, a la muerte más en concreto la que nos lleva a refllexionar sobre lo infimo de nuestras vidas y el paso del tiempo.

No se si te abré respondido a algo, pero bueno, 1 abrazo a todos.

Izquierdo

Anónimo dijo...

je je je...

Descúbrete valiente... !

Anónimo dijo...

pues no, aquí nadie responde nada! cada uno a su puta bola!! ea!

yo solo le pido a los señores científicos que no acaben con la magia. Hay magia dentro de mi melón!!! en el amor y en el hastío.. hay magia!

así que no quiero oir hablar de sustancias!! (bueno, de una si...)

Anónimo dijo...

Quién sino...?


Hablando de magia, creo que el amor es precisamente lo hace que las pequeñas cosas se vuelvan mágicas.

Sigue conservando la magia que guarda tu melón ...